Un profesional sanitario es una persona que ha recibido formación universitaria y está capacitada para brindar atención médica, terapéutica o de prevención a los pacientes. Su trabajo está relacionado con la salud y el bienestar de las personas, y puede involucrar la atención directa, la prevención de enfermedades, la rehabilitación, o el apoyo en la gestión de la salud en distintos niveles.
Un profesional sanitario es una persona que ha recibido formación universitaria y está capacitada para brindar atención médica, terapéutica o de prevención a los pacientes. Su trabajo está relacionado con la salud y el bienestar de las personas, y puede involucrar la atención directa, la prevención de enfermedades, la rehabilitación, o el apoyo en la gestión de la salud en distintos niveles.
Las personas que no son consideradas profesionales sanitarios son aquellas que no tienen una formación específica ni una cualificación reglada para ejercer funciones de atención médica, terapéutica o preventiva. Es decir, no han cursado estudios universitarios en áreas de la salud ni están autorizadas para proporcionar atención directa a los pacientes en términos médicos, psicológicos, rehabilitadores o preventivos.
Algunos ejemplos de personas que NO son considerados cómo profesionales sanitarios son masajistas, quiromasajistas, quiroprácticos, naturópatas, esteticistas y peluqueras/os. Tampoco son considerados profesionales sanitarios los osteópatas, a no ser que de base sean fisioterapeutas o médicos (más info en apartados 11,12 y 13), ni los entrenadores personales o coach de salud, a no ser que tengan de base alguna formación universitaria en el área de la salud.
La psiconeuroinmunología (PNIE) o salud integrativa, es una disciplina interdisciplinaria de la salud basada en la evidencia científica, que estudia la interacción entre los diferentes sistemas corporales (nervioso, inmune, hormonal…). Su objetivo principal es comprender cómo estos sistemas se comunican entre sí, y cómo influyen en la salud y la enfermedad.
La PNIE no está limitada a una única profesión sanitaria, sino que es un enfoque interdisciplinario que puede ser adoptado por profesionales de diferentes áreas de la salud, y su formación incluye conocimientos interrelacionados. Los tres perfiles profesionales sanitarios más comunes que trabajan bajo este enfoque son fisioterapeutas, médicos y nutricionistas.
Un fisioterapeuta es un profesional sanitario especializado en la prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de lesiones y trastornos del sistema neuromusculoesquelético, mediante el uso de diferentes técnicas físicas terapéuticas, ejercicios específicos, reeducación u otros métodos basados siempre en la evidencia científica. Su principal medio físico terapéutico de actuación son las manos (terapia manual), aunque también puede utilizar otros medios físicos como agujas de acupuntura, ventosas o vendajes, entre otros. A partir de un enfoque integral desde el punto de vista estructural, un fisioterapeuta trabaja para mejorar la calidad de vida de las personas.
En la sanidad pública se realizan visitas masificadas y no personalizadas, en donde cada fisioterapeuta suele atender al mismo tiempo a unos 5 pacientes aproximadamente.
Los tratamientos en este tipo de centros están basados en aplicar máquinas (electroterapia), porque es la única manera de poder atender a todos a la vez, lo que va en detrimento de la calidad del tratamiento, resultando mucho más complicado poder ayudar al paciente. En la universidad no nos formaron para trabajar así, este sistema limita al fisioterapeuta e impide que desarrolle todo su potencial.
De la misma manera que en el sistema sanitario público, en los centros de fisioterapia que trabajan con mútuas de salud privadas, se realizan visitas masificadas y no personalizadas, en donde cada fisioterapeuta suele atender, a veces, incluso en sesiones de tan sólo 30 minutos, a 4-5 pacientes a la vez.
Los tratamientos en este tipo de centros están basados en aplicar máquinas (electroterapia), porque es la única manera de poder atender a todos al mismo tiempo, lo que va en detrimento de la calidad del tratamiento, resultando mucho más complicado poder ayudar al paciente. En la universidad no nos formaron para trabajar así, este sistema limita al fisioterapeuta e impide que desarrolle todo su potencial.
No, “el sistema de mútuas” no me permitiría realizar un tratamiento individual y personalizado, ni un abordaje global y holístico del paciente, que es mi filosofía de trabajo. Las condiciones de las mútuas “empujan” a los centros que han decidido trabajar con ese sistema, a realizar visitas masificadas y no personalizadas, lo que va en detrimento de la calidad del tratamiento. La verdadera fisioterapia y rehabilitación sólo se puede llevar a cabo a partir de visitas individuales y personalizadas.
Pero, si tu seguro de salud cubre el reembolso parcial o total de las visitas con profesionales sanitarios que estén fuera del cuadro médico de tu mutua, te proporcionaré una factura por cada visita, la cual deberás presentar a tu mutua para que procesen el reembolso correspondiente.
No. El fisioterapeuta está capacitado y formado, para atender a un paciente como profesional sanitario de primera instancia, pudiendo así diagnosticar y tratar la dolencia del sistema neuromusculoesquelético en cuestión, mediante técnicas terapéuticas no farmacológicas.
Es un profesional no sanitario, que utilizando sus manos como herramienta única y principal, enfatiza en la manipulación del tejido miofascial y óseo para el tratamiento de diferentes dolencias físicas desde un punto de vista global.
No existe una entidad reguladora global para la práctica de la osteopatía dentro de la Unión Europea. Esta regulación se hace país por país. En España concretamente, la osteopatía no es una profesión sanitaria y no está incluida en el Código de la Sanidad Pública.
El osteópata no está considerado como un profesional sanitario, como si lo son el fisioterapeuta y el médico. La mejor manera de saber si ese osteópata es de confianza, es asegurándote de que ese osteópata es, al mismo tiempo, fisioterapeuta o médico. Las mejores formaciones de osteopatía se imparten en universidades o en escuelas con aval universitario, en forma de estudios post-universitarios de postgrado o máster, por lo que a esas formaciones sólo pueden acceder fisioterapeutas o médicos. Es decir, los osteópatas de confianza son al mismo tiempo fisioterapeutas o médicos.